Es una de las frutas más esperadas del año, dulces, jugosas, de color intenso, esta fruta de tamaño “bocado” cumple, además, con el buen cometido de aportarnos grandes dosis de salud a nuestro organismo.

El 85% de su carne está compuesta de agua y por cada 100 gramos de esta estupenda fruta, ingerimos tan solo 60 kcalorías, para qué andar dándole vueltas a si comerla o no. Zámpatelas!

Contra la gota y el exceso de ácido úrico: ¡cereza!

Ya desde el siglo XVIII se combatían los ataques de gota con cerezas. Sus propiedades son tan efectivas ante esta dolencia, que estudios recientes confirman que su consumo al natural o en zumo, reduce los niveles de ácido úrico en sangre y previene los dolorosos ataques. Todo ello, gracias a algunos de sus compuestos como la antocianina, que tiene los efectos de un ibuprofeno natural, reduciendo la inflamación y el dolor, pero con el beneficio de no ser un producto químico, sino que proviene de una fuente natural.

La fibra y el potasio que contienen las cerezas favorecen el tránsito intestinal y la eliminación de líquidos, ayudando a reducir el ácido úrico y previniendo la formación de cálculos renales y biliales.

Un buen alimento en dietas de adelgazamiento.

Las cerezas son unas buenas aliadas en dietas de adelgazamiento por su contenido alto en fibra, agua y potasio, haciendo de ellas una fruta muy saciante, laxante y diurética.  

Aportan belleza y juventud a nuestra piel.

El aporte de beta-caroteno, 19 veces más que los arándanos y las fresas, y vitamina C ayuda a tener protegida nuestra piel. Sus antioxidantes naturales ayudan a reducir la acción negativa de los radicales libres, luchando contra el envejecimiento prematuro de nuestra piel.

Al mejorar la microcirculación, combaten la celulitis aportando un aspecto más terso y saludable a nuestra piel. 

 

Cerezas y a dormir tranquilos

Las cerezas son una fuente dietética natural de melatonina, cinco veces más alto que las moras y las fresas, que ayuda a tratar el insomnio y mantener la función saludable de las articulaciones.

Aptas para diabéticos

Reducen el riesgo de aparición de la diabetes y sus síntomas. Pueden ser digeridas por personas con esta patología debido a su alto contenido en fructosa y levulosa, de bajo índice glucémico.

Además de todo esto, las cerezas mantienen un estupendo nivel de salud del cerebro y nos ayudan a prevenir la pérdida de memoria.

Contienen vitaminas como el betacaroteno (provitamina A), ácido fólico, vitamina C, B1, B2, B3, B5, B6 y E, calcio, magnesio, fósforo, potasio, sodio, hierro, cobre y zinc, entre otros.